Parvovirus y el peligro que representa para los perros

Hoy hablaremos de una de las enfermedades caninas más contagiosas y a su vez peligrosas, se trata del parvovirus.

La enfermedad parvovirosis canina es provocada por un virus extremadamente resistente que se encuentra en el entorno.

Este bicho provoca gastroenteritis severa y, a menudo, complicaciones hemorrágicas.

Para ejemplificar lo altamente contagioso de este virus, si una madre se contamina durante la gestación, el virus afectará a los fetos. El virus no puede replicarse por sí mismo, y por lo tanto, tiene que usar otras células que lo ayuden a multiplicarse. Esto provoca que, en los cachorros jóvenes, el parvovirus canino colonizará las células del tracto digestivo porque estas se regeneran a gran velocidad.

Es por eso que esta enfermedad es especialmente peligrosa en cachorros, ya que a su corta edad suele ser fatal si no se detecta a tiempo.

La razón de su peligro, radica en su alta capacidad para contagiar, y es que un perro infectado puede evacuar una gran cantidad de virus a través de sus heces, científicos estiman que en cada gramo de materia fecal se puede contener hasta 1 millón de dosis infecciosas, suficientes para contagiar a un millón de perros, esto en condiciones experimentales.

Los humanos también pueden contagiarse y a su vez, contagiar, de parvovirus. De hecho, cualquier objeto o ser vivo en contacto con heces contagiadas, está expuesto.

Afortunadamente, se puede evitar el parvovirus a través de la vacunación, por ello es fundamental que los cachorros reciban sus vacunas de acuerdo a su edad.

Sin embargo, como sabemos, los virus mutan, por fortuna desde que fue descubierto en la década de los 70, este virus ha tenido pocos cambios, por lo que la vacuna sigue siendo muy efectiva.

Para hacer una pronta detección es importante conocer los principales síntomas del parvovirus, los cuales son:

Fiebre, letargo, diarrea, en este caso suele aparecer de forma sanguinolenta, vómitos constantes, deshidratación y por consecuencia pérdida severa de peso.

Si sospechas que tu cachorro está contagiado, debes acudir de inmediato al veterinario, quien le hará algunas pruebas y estudios clínicos, de confirmar la enfermedad se indicará el procedimiento a seguir.

 

 

 

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